viernes, 11 de diciembre de 2009

Mi sueño.

Aww, ahora que mi casa está en paz por un momento, cosa que parece imposible, creo que voy a contar algo que me pasó el otro día.
Tuve un sueño espantoso, más que horrendo, realmente desbastador.
Soñé que mi abuela, la abuela que amo más que a mi vida, moría.
Me desperté, y lloraba soñando, ¡Pero lloraba en la realidad también! Y seguí llorando después de concientizarme (Eso no existe no? Bueno, necesitaba expresarme de esa forma) que era solo un sueño. Por que... Wow. Ahí me di cuenta de cuanto la amo, y de verdad, no se que voy a hacer el día que ella no esté. Solo se que al otro día, cuando estaba aún en el liceo, sentía la necesidad, de... No se, de saber que todo seguía su rumbo, que todo iba bien; así que le mandé un mensaje, y luego, me arrepentí. A ver, no me arrepentí de mandarle un mensaje, no, claro que no, me arrepentí de haber sido tan, pero tan estúpida de preocuparme por ella después de que soñé aquello. Y ahí recordé esa frase, la que dice algo como: No valoras lo que tienes hasta que lo pierdes. Y ahí me di cuenta, de que, gracias a no se qué, tuve ese triste, pero maravilloso sueño que hizo que despertara, que despertara de otra forma, no como lo hago todas las mañanas, que despertara en mi propia realidad, que le mandara un mensaje a la Yaya, y que al final le pusiera un simple, pero tan valeroso Te quiero mucho.
No suelo decirle a la gente cuánto la quiero, o lo que lo necesito, no se a que le tengo miedo, o vergüenza. Tampoco soy melosa. Soy asquerosa con esas personas que intentan darme cariño, y sobre protectora y realmente MELOSA con esas personas a las que no le va ni le vienen mis caricias. Y si, parezco la exclusividad de mujer. Siempre tomo todo para el otro lado.
Ante pensaba que los demás estaban equivocados, ahora digo, wow, o se equivocan todos, o la equivocada soy yo; por un razonamiento lógico y matemático, me doy cuenta de que la única que ve el mundo con otros ojos, SOY YO.

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